13.1.08

Toda una vida

Anteayer fui a comprarme un portátil nuevo, con el asesoramiento de Andújar. Le hice caso y, además del ordenador con pantalla de 17", adquirí un disco duro (de un terabyte) y unos altavoces. Al salir, me dijo Andújar: "Con mil euros que te has gastado, te acabas de plantar en el siglo XXI". Y es verdad. El portátil antiguo (un Acer TravelMate 512T, como el de la imagen) me lo compré en enero de 2000: purito siglo XX aún. Con él he estado todo este tiempo; cada vez más cascajo el aparato. El ordenador nuevo y el disco duro los dejé con Andújar, para que me los configurase y llenase de cositas. Cuando regresé a casa me fijé en el viejo y pensé en lo que se va con él. Toda mi vida internética, por ejemplo. Y todo lo que he escrito (y todo lo que no he escrito) en estos ocho años. En su pantalla y en su teclado: todo un mundo. Lo despido sin nostalgia. Ayer tarde recogí el nuevo: cargado ya de programas, de música, de películas, series y documentales. Un buen porcentaje es brasileño: auténticas joyas. La destilación de lo que ha venido cazando Andújar en los últimos tiempos. Uno mira estos objetos tecnológicos y tienen una hermosura cálida, de talismán.