1.10.08

Correspondencia

Recibo este mail de un lector que firma como Jacobo Deza:
Estimado Montano,

No dejo de preguntarme día a día por un tema que me tiene atribulado: ¿de qué vive usted? Es decir, ¿cómo se gana los berberechos? Mi misión en esta vida es, sin duda, irme a Assilah a escribir una larga temporada, pero me doy cuenta de que al cabo de una semana finalizaría mi estadía por no disponer de crédito (¡bancario!) suficiente.

¿Consiguió usted una honrosa herencia familiar? ¿Ha vendido millones de copias de su traducción sobre la bossa nova? ¿de qué me he perdido por el camino?

Haga el favor, ilumíneme sobre su situación para entender que algún día, yo también, podré encontrar mi Assilah personal.

Saludos.

JD

He aquí lo que le he respondido:

No se fíe de las apariencias: lo mío está siendo un suicidio económico con todas las de la ley.

Saludos,
J. A.