30.3.10

Cuestionario Facebook

Le he tomado gusto a responder cuestionarios. Es un modo fácil (¡facilón!) de brillar. Así que ayer puse este anuncio en Facebook: "Queridos, mi egolatría necesita alimentación. Por eso he decidido someterme a una ciber-entrevista con ustedes. Vayan dejando aquí las preguntas que quieran hacerme, de lo que sea". Pretendía llegar a cien, pero al final me he plantado en un número más redondo aún: el 69. 

1. ¿Perales de Tajuña o Villarejo de Salvanes? (es para irme estas vacaciones de semana santa)
Perales de Tajuña, evidentísimamente. 

2. ¿Cargas a derecha o izquierda? ¿Cuánto? 
A izquierda. Lo normal. 

3. Pechuga o muslo? :)) 
Pechuga: me gusta la provisión. 

4. cervantes o pertierra? 
Depende del momento. (No se puede ser cervantino sin interrupción :-) 

5. sigue pidiendo la paga de los domingos a sus progenitores A y B? :-) 
No. Aunque me he quedado a medio camino en mis planes: a estas alturas debería tener ya hijos de los que vivir. 

6. Qué tipo de relación mantiene usted con Mabel Ladyblues? 
¡De admiración y deleite! 

7. Por qué Fernando Alonso no goza de la simpatía del público como Carlos Sainz? 
En realidad, a quien queríamos era al copiloto de Carlos Sainz, Luis Moya. Cuando Sainz prescindió de Moya, también dejamos de querer a Sainz. A Alonso nunca lo hemos querido porque nunca ha tenido de copiloto a Moya. Debería animarse y granjearse el favor del público metiendo en su Ferrari a Moya. 

8. ¿Samba o rumbo? 
Si es rumbo, rumbo. Si querías decir rumba, ¡samba! 

9. ¿Estoy enamorado o lo único que me pasa es que me gusta más follar que a un tonto una tiza?
Con los años uno comprende que follar es vulgar. Lo aristocrático es el amor. (Y lo decadente, porque la aristocracia es decadente.) 

10. ¿algodon o felpa? ( para los chandales) 
Para mi chándal, lo ideal sería algodón directamente extraído por los bluesmen del Mississippi. 

11. cuál es causa príncipal de que tenga usted uno de los dos biceps mucho más desarollado? 
Es con el que le aparto a usted cuando trata de acercárseme por detrás, amigo V. :-) 

12. Lejarreta, Delgado, Induráin? 
Induráin, encarnación de la nobleza. También admiré mucho a Lejarreta, mezcla de Manolete y Gary Cooper. De Delgado no fui nunca. Cuando tenía que haber sido de Delgado, escogí a Cabestany. 

13. Lavanda, vainilla o mezcla de ambos aromas? 
¡Lavanda! Sobre todo, la que precede al Mont Ventoux

14. ¿Bocadillo de chorizo o choripán? 
¡Choripán! En buena compañía, eso sí. Ahora que lo pienso: jamás me he tomado un choripán solo. (Aunque mal acompañado sí.) 

15. ¿Cuántos continentes abarca su ego? 
Sólo uno: por supuesto, el continente Antártico. (Me acabo de acordar de aquello de Marx: "las heladas aguas del cálculo egoísta".) 

16. spit or swallow? (escupir o tragar?) 
¡Escupir! Eso sí: en la dirección adecuada. 

17. ¿has realizado alguna vez un "carradine"? 
Sí, pero la que no sobrevivió fue la puerta del armario. 

18. ¿Por qué razón puede uno llegar a extremar las cosas hasta el punto de que sólo hay una opción dentro de un gran abanico??????????? 
Hay que simplificar. Soy un gran partidario de la simplificación. Ese abanico hay que convertirlo en navaja: la navaja de Ockham. 

19. Si después de una mujer lo mandara a dormir a su casita y no le ofreciera ni una mala cama supletoria, ¿cómo se sentiría? 
En realidad, detesto eso de la cama supletoria. Mi opción A es quedarme a dormir con la mujer. Y, si no puede ser, la opción B: largarme. La cama supletoria apenas sería la opción C, y muy a disgusto. 

20. ¿Si tragas es por amor? 
Ah, sí: por amor se traga mucho! 

21. ¿Hendija con o sin vedeja? 
Me gusta todo el espectro piloso que puede brindar una hendija. Me gusta también la depilación, pero no el totalitarismo de la depilación que hoy se estila. Ya no quedan oasis frondosos en las playas nudistas. 

22. Una sencillita. Desde un punto vista empírico y eminentemente práctico, ¿estás de acuerdo en que la estructura dialéctica de una simbiosis entre el relámpago de la intuición y la sombra de las certezas se asemeja de forma asombrosa a una suerte de alianza entre los caprichos del albedrío y las urgencias de la renuncia como forma de entender los alardes del hastío? 
Eso último me ha encantado: ¡los alardes del hastío! ¡Así podría titularse mi autobiografía! 

23. ¿Hilillo cayendo por una esquina de la boca o todo para dentro? 
Hilillo. 

24. ¿Badajo con o sin vedeja? 
Jajaja, eso que lo decida la usufructuaria del badajo. (Hablo en términos heterosexuales.) 

25. ¿Muerte en Poe o vida en Jabois? 
¡Ah, qué distinto destino el del pobre Poe de haber dispuesto del pelazo de Jabois! 

26. Culininguis o Sifoncito? 
¿Culi, dice? Jajaja. No, ni sifoncito ni culi: cuni. 

27. ¿Mabel o Paty? Y sin salírseme por peteneras, please. 
Aquí sí escojo la C: me salgo por peteneras. 

28. ¿Desierto o Gispert? ¡Gispert! 

29. los zapatos de rejilla con o sin calcetín de tenis? 
Sin zapatos de rejilla. 

30. era Cristo dueño de las ropas que llevaba?? 
Lo peor que le pasó a Cristo fue que su túnica le tocó a Victor Mature en el sorteo que hicieron al pie de la cruz. Y ésa sigue siendo la mayor desgracia sufrida por el cristianismo, contando los leones de Nerón.

31. dicen que todavía usted no le ha quitado los rodines a la bicicleta. Que hay de cierto en ello? 
Es verdad. Se los quitaré el día que suba a La Morcuera para machacarle, amigo V. 

32. ¿En qué momento empezó a pensar en si mismo en términos megalomaniacos? 
Ese momento no ha llegado aún. ¡Agárrense! 

33. ¿Es capaz de negar que en determinados momentos usted también se arranca por palmas?
¡Jamás! 

34. ¿Por qué el casticismo español no y el brasileño sí? 
Probablemente porque soy español. Me temo que, de haber nacido en Japón, sería uno de esos japoneses que estudian flamenco. 

35. ¿Cómo le sienta la comparación con Matías Colsada? 
Injusta para mis chicas: ¡ellas son más alegres que las de Colsada! 

36. ¿Qué libro desearía escribir? 
Uno que me hiciera legible. 

37. ¿Qué preferiría: emborracharse con sabina o drogarse con sánchez dragó? 
Drogarme con Dragó, y no sólo por motivos fonéticos. Sabina, pese a los pesares, me cae bien; pero no soportaría que en plena borrachera se nos pegara alguno de sus enrollados amigos. 

38. Confeccione en dos patadas un canon literario español. 
Muera la pesadez, viva la ligereza. Muera la hojarasca, viva el nervio. 

39. Imagínese que usted forma parte de un trio sexual con dos hembras y las dos comienzan a comerse la boca ajenas a usted: ¿cómo reaccionaría? 
Me lo tomaría con deportividad. (Y me quedaría a ver el partido.) 

40. Dame ejemplos de una frase infame 
Cualquiera de las que escribe o dice a diario el ensaimado capilar Anasagasti. 

41. ¿Tienen excepciones las leyes fonéticas? 
La fonética siempre me resultó retráctil, aunque en la carrera me pusieron cachondo los avatares de la yod. 

42. No es lo mismo soltar una infamia que escribirla y publicarla? 
Bueno, lo diferente es la permanencia (si no se graba). 

43. Algunos niños tienen la suerte de tener tatarabuela. Qué te parece lo de tener tatarabuela? Te hubiese gustado tener tatarabuela? 
No conocí a mi tatarabuela, pero sí a mi bisabuela. Curiosamente, su cama estaba en la habitación del pueblo en la que un verano mi hermana y yo nos enteramos de la muerte de Elvis Presley, al que hasta entonces conocíamos como "el de Hawaii". 

44. Dois é show? 
Depende de los dos, jajaja. Pero el dois de Partimpim no lo he escuchado aún. 

45. Y una en disyuntiva: Marisa Monte o Adriana Calcanhotto? O ambas o ninguna? 
Calcanhotto. Ambas, pero más Calcanhotto. 

46. Delante del espejo ¿qué perfil es usted, Don Monty? 
Delante del espejo soy el hombre que se peina, se afeita, se lava los dientes, se ajusta la camisa, mete la panza o se mira la polla. 

47. Las mujeres, maestro. Unos animalitos entrañables. En cuanto se les coge el truquillo, entretiene mucho el espectáculo. 

48. Simenon y sus diez mil mujeres y Reinaldo Arenas y sus cinco mil hombres... Esos son cuentos o esas son cuentas? 
Cuentas: son cantidades posibles. Doy fe. 

49. ¿Se llevaría "facebook" a una isla desierta? 
Con Facebook una isla desierta no sería una isla desierta. Y sin Facebook, una populosa ciudad lo sería.

50. ¿De que manera ha influido "Dinosaur Bodyweight Training" en su escritura? 
Tuvo más influencia mi aparato favorito de todos los tiempos: el abdominazer

51. ¿Considera su totémico hipopótamo un "ready-made" en toda regla? 
No lo había pensado hasta ahora, pero ¡sí! Gracias por la revelación! 

52. ¿Está cobrevalorado el Renacimiento? ¿Y el Whopper? ¿Y el Double Big Mac Bacon con queso? 
Responderé en plan borgiano: nada está sobrevalorado y todo lo está. 

53. ¿Cuántos amigos reales tiene usted? 
Cada vez menos. 
  
54. Con Mabel Ladyblues, prefiere bailar samba o "Cuenca Minera"? 
Con Mabel tengo pendiente un viaje a Blasil, donde intentaremos fusionar el acarajé con el oricio. En cuanto a nuestra sintonía: hemos llegado al acuerdo de que blue bossa

55. ¿La Moto Pollo o el Bulli? 
¡Moto Pollo, por supuesto! Aunque en Málaga hay un emporio no a domicilio pero mejor aún que el Moto Pollo (y que el Bulli): el Tano, donde uno se pega alitadas de pollo en plan vikingo. 

56. Ronald McDonals o los payasos gemelos de Micolor? 
Ronald McDonald, que una amiga mía dice que se parece a él en una foto :-) 

57. ¿Admira algún hecho militar? 
Sí, todas las movidas con paracaidistas. 

58. ¿Le gusta el squash? 
Ese vídeo ha hecho que me enamore de él. 

59. Y ahora en serio: ¿tú también, como el señor de Montaigne, eres el objeto de tus libros? 
Sí, pero con un poco de teatro. Lo del fingidor, etc. 

60. en cuestión de salva-slips, Mon; Carefree o Tena Lady? 
Tena Lady, por favor! Mis fans ya lo saben. 

61. Bosque o estepa? Bosque de Jünger, estepa de Strogoff. 

62. Cuéntenos cómo descubrió su vocación periodística. 
Nunca he tenido vocación periodística. Aunque ha cambiado mi apreciación: a diferencia de antes, ahora el periodismo me resulta simpático y admiro a los periodistas. (Los admiro, claro está, cuando son periodistas: algo que ocurre escasamente.) 

63. ¿Sigues viendo a Fernandisco a escondidas para comentar los grandes hits musicales de los 40?
A Fernandisco sólo me lo pongo cuando estoy muy amojamado y necesito un revulsivo brutal. 

64. ¿es cierto que en otra vida fue usted el confesor del marqués de Sade? 
Sade siempre me la sudó. Aunque hace unos años me enteré de algo que sí me interesa: la Laura de Petrarca era una antepasada de Sade. 

65. Don Ego, ¿para cuando la открытие en su blog? 
He tenido que ir al traductor de ruso de Google: mi blog ya está lo suficientemente abierto sin necesidad de comentarios :-) Y mi Nomenklatura unipersonal va a mantenerlo así.

66. ¿Por qué no te has entregado en cuerpo y alma a la perpetuación de la especie? 
Porque he tomado las medidas adecuadas. 

67. ¿tenedor o cuchara? 
¡Tenedor! Ahora recuerdo que de niño me gustaba agarrarlo y decir: "Soy el demonio pinchapapas". 

68. "Qué sentido tiene todo esto?" 
El sentido de que es irreversible. Esa sola característica da algunas respuestas. 

69. ¿Roncas? 
Unas veces sí y otras no. Pero lo que no sé es si estarán ya roncando ustedes.

28.3.10

El Cristo del Samba

Desde que dejé de ser creyente, algo que en mí se produjo sin trauma (la religión se me desprendió con naturalidad, con los años infantiles), me he emocionado cuatro veces con Cristo. La primera con un cuadro que solía ir a visitar al Museo del Prado durante mi época de estudiante: El descendimiento de la cruz, de Roger Van der Weyden. La segunda con el limpio poema que le dedicó Borges en Los conjurados: “Cristo en la cruz”. La tercera con el final de Ordet (La palabra), de Dreyer. Y la cuarta una tarde de Semana Santa en que tenía una cita que me obligaba a atravesar el centro, zona que procuro eludir en estas fechas desde hace mucho. Para protegerme acústicamente del estruendo de las procesiones, me puse los auriculares con música brasileña, sambas de Noel Rosa. Recuerdo la alegría primaveral y la levedad de aquellos años ligeros; años que no eran aún petrolíferos. Cuando entré en el fragor, los tambores y las cornetas, atenuados, se metieron por debajo de mi música. El efecto era agradable: se incorporaban a la batucada, apenas con un leve desajuste. Y más allá asomaba la imagen de un Cristo atado y de rojo, con esa oscilación que a mí siempre me ha recordado a la de los ciclistas cuando escalan un gran puerto, y que también es la de un baile, un baile agónico. La mezcla era feliz; y se me ocurrió bautizar al Cristo de aquel momento, sólo al de aquel momento, como "el Cristo del Samba".

[Publicado en Frontera D]

27.3.10

Zut 11

Ayer tuve al fin el número 11 de la revista Zut, donde se publica mi "Autobiografía brasileñista". Ocupa doce páginas, no está mal. La revista no tiene edición on-line (se vende en librerías), pero aquí puede leerse el índice del número. Entre otros, colaboran José Luis Pardo, Luis Antonio de Villena, Rodrigo Fresán, Juan Bonilla (coordinador de Zut) y mi amigo Hervás.

22.3.10

El hombre más odiado de Valladolid

“Por fin estoy en Facebook”, me escribió hace unos días, resignado, Eduardo Jordá. Sus amigos facebookeros llevábamos tiempo intentando convencerle de que se registrara, pero no había manera. Y aún seguía resistiéndose a la succión de este nuevo Maelstrom, cuando Facebook le ha caído encima. A una tal Pilar Bedate le molestó el artículo que Jordá publicó en el Diario de Mallorca a la muerte de Delibes, “Un mundo en extinción”, y creó un grupo de Facebook llamado “Todos contra el artículo de Eduardo Jordá sobre Miguel Delibes y Valladolid”. En el momento en que escribo estas líneas, el grupo cuenta con 4.759 miembros. Mi amigo Jordá, el bondadoso Jordá (¡el delibescamente compasivo Jordá!), es hoy el hombre más odiado de Valladolid.

El espectáculo es deprimente y regocijante al mismo tiempo. Deprimente, porque siempre lo es la exhibición de la chusma, el corro de rebuznos autoconvencidos y desatados. Regocijante, porque le da plenamente la razón a Jordá. Lo que se está diciendo en ese grupo convierte casi en elogio la leve desgana que manifestaba hacia Valladolid en su artículo. A juzgar por esos 4.759 vallisoletanos, Valladolid es peor: mucho peor. Una ciudad con 4.759 habitantes como esos no puede ser sino opresiva y sórdida. (Lo cual, dicho sea de paso, centuplica el mérito de Delibes: por haber logrado crear una obra grande y filantrópica enmedio de un material humano tan deleznable.)

¡Ah, Castilla! En este país de bobos en que se va convirtiendo España (todavía está fresca la que se montó con “los gallegos”), los castellanos parecían mantenerse limpios, aparte. Me ha gustado Castilla cuando la he visitado. Me he encontrado cómodo en sus ciudades, en sus pueblos; he apreciado sus campos. De los poemas de Antonio Machado, seguía recreándome en los paisajísticos y elogiosos. Los que criticaban Castilla, en cambio, no los entendía muy bien. Ese “desprecia cuanto ignora” parecía haber perdido su sentido. Pero de pronto rebrota el corazón cazurro y polvoriento de la Península, para que el mapa de nuestra estolidez quede también rellenado por el centro.

Antes he dicho chusma, pero no soy elitista. Hablo de chusma no porque considere que haya (ni deba haber) una minoría por encima, sino porque la masa se ha desplomado estrepitosamente. No puede decirse que exista demasiado nivel entre los, así llamados, profesionales de los medios; pero basta con que se abran los canales al público para que afluya algo peor aún: algo peor dicho, más soez, más sectario, peor hilado, más estomacal. Supongo que con ello tendrá que ver el desmantelamiento del bachillerato, que es lo que define el tono cultural medio. Y también, por supuesto, el asfixiante localismo que se va adueñando cada vez más de este país de todos los demonios.

* * *
PS. Un amigo de Valladolid escribe en su blog "De la vida provinciana".

[Publicado en Frontera D]

15.3.10

Los dueños de la expresión

La obscenidad de quienes hablan de libertad de expresión a la vez que defienden la dictadura cubana nunca se ha mostrado de un modo tan transparente como en el breve audio de Belén Gopegui que hay en YouTube. Me permito transcribir sus palabras:
Quienes defendemos a Cuba contra la agresión tenemos en nuestros países que atender a otra clase de agresión: el uso de la mentira de los grandes medios de comunicación. Cuando tanto se habla de libertad de expresión, algún día debiera empezar a decirse que la libertad real de expresión consiste como mínimo en poder replicar en el mismo medio y con el mismo espacio a cada mentira que haya sido publicada. Porque defendiendo a Cuba nos defendemos. Porque si abandonáramos la revolución cubana nos abandonaríamos a nosotros mismos.
¿Qué se puede decir ante eso? Es pura basura verbal. Puro excremento religioso. Es un párrafo tan pétreamente falso, que resulta inatacable. Esa defensa de la “libertad de expresión” (desde un país en que se encuentra conculcada) es una vía muerta, ante la cual no puede haber diálogo posible. Es un extravío de la razón y de la realidad: un lenguaje de locos ante el que no se puede hacer nada, salvo denunciarlo. O soltar una carcajada.

Con lo de Willy Toledo ha pasado estos días lo mismo. El individuo, desde su doble condición privilegiada de hijo de la alta burguesía madrileña y de actor de éxito, se permite llamar delincuente a la víctima de una dictadura, que además era albañil. Dan hasta ganas de rescatar al viejo Marx para determinar cuáles son las emanaciones ideológicas de las respectivas clases sociales: alta burguesía madrileña, castrismo; proletariado cubano, anticastrismo.

Contra la bellaquería de Willy Toledo se han escrito, por fortuna, bastantes artículos, el último de los cuales ha sido el de anteayer de Antonio Muñoz Molina: “La costumbre de la infamia”. Ahí está dicho todo, de un modo que suscribo plenamente. Queda mencionar el asunto colateral de la “libertad de expresión”: mejor dicho, de la parodia del término en boca de Willy Toledo y el grupo de actores que firmó un manifiesto en su defensa.

Sintomática la maniobra: quejarse de falta de libertad de expresión... justo después de haberla ejercido. Más allá de la conocida estrategia de intentar ocupar la posición de la víctima, ¿qué se trasluce de ello? ¿De qué se quejaba Willy Toledo realmente? De haber sido criticado: es decir, de que otros hayan ejercido su libertad de expresión contra él. Para Willy Toledo y sus cómplices, la libertad de expresión es poder decir lo que quieran (cualquier burrada), pero sin que nadie les replique. Quieren tener la última palabra. Quieren ser los dueños de la expresión. Exactamente como los tiranos con los que simpatizan.

[Publicado en Frontera D]

1.3.10

Tabarra andaluza

Supongo que es mi carácter y que si fuese brasileño detestaría Brasil. Pero el caso es que soy andaluz y detesto Andalucía (y amo Brasil, por cierto). Ahora está de moda que los nacionalistas acusen a los antinacionalistas de no amar su tierra, y de incluso odiarla (¡el famoso auto-odio!). Es mentira cochina, claro; como el 99% de lo que emiten los nacionalistas. Pero si a mí me lo dijeran, acertarían. Se me ha atravesado mi tierra: ¡qué le vamos a hacer!

No detesto ninguna idea etérea de Andalucía, ni ningún ser andaluz idealizado (esas monsergas me pueden caer hasta simpáticas, y además siempre salen patios, fuentecitas y tal): la Andalucía que detesto es la que hay. Esta Andalucía no abstracta sino concreta: la que es ya un resultado. El resultado –más allá (¡o más acá!) de su larga historia– de una política, una educación y una Radio Televisión Andaluza. Un resultado, principalmente, del PSOE andaluz; pero también el PP andaluz, y la Izquierda Unida andaluza, y el Partido Andalucista, y los gilismos varios: todos moviéndose de un modo muy profundo –para qué nos vamos a engañar– con las inercias mentales del franquismo. Repasar las jetas de los políticos andaluces puede ser lo más parecido a un paseo entre la estolidez y la muerte.

Dicho lo cual, añado que el pueblo está encantado: la comunión con sus políticos es absoluta. Cuando llega la Navidad y los parlamentarios andaluces se ponen a cantar villancicos, a mí se me revuelve el estómago. Pero a la gente le gusta. Lo mismo pasa con Canal Sur: es una cadena que se amolda sin roce al andaluz realmente existente. Yo manifiesto mi repulsión, pero tampoco quiero darme aires. Sé que soy yo el que sobra. Mi malestar es aislado y cenizo: no prolifera. La única esperanza (para que Andalucía empezara a dejar de desagradarme, en una o dos generaciones, a ) sería una buena enseñanza pública; pero la que existe es justo lo contrario: funciona, casi sin exageración, como una fábrica de espectadores de Canal Sur. El sistema se autoabastece.

El remate, como siempre, es la retórica. No basta con sufrir la tabarra andaluza de los hechos: también hay que tragarse los discursos. Este domingo, Día de Andalucía, ha caído un chaparrón extra. Aunque al final ha resultado instructivo. Estaba yo observando que todos nuestros políticos, sean del partido que sean, adoptan la manera de hablar de Antonio Burgos, prototipo del archicursi andaluz, cuando de pronto me he dado cuenta del sustrato antropológico. La devoción que hay por la Autonomía es igual que la que se tiene por las Vírgenes. Y entonces ha encajado todo. Nuestros políticos, que son unos capillitas y no hay nada que les guste más que salir en una procesión, han encontrado en Santa Autonomía a la Virgen que les faltaba. Lo demás: beatería e incienso (y algún eructo).

[Publicado en Frontera D]