Hace dos semanas expresé aquí mi opinión (crítica) sobre Federico Jiménez Losantos. Hoy tengo que salir en su apoyo, porque no se puede dejar pasar la alucinante denuncia que ha interpuesto la Generalitat de Cataluña contra él, nada menos que “en representación y defensa del pueblo catalán”. El Volk, qué yuyu. El “pueblo” glorificado, y echado a perder, por una tradición que culmina en el nazismo. El Volk, en cuyo nombre se asesinó en masa y se destruyó Europa.
Ese abyecto y repulsivo y estólido Volk, se le añada “catalán” o lo que sea, se alza, otra vez, contra un individuo. El Volk cercenando la libertad de expresión, o decidido a hacerlo si le dejan: si no hay Estado de Derecho que se lo impida. Ese Volk al que, como dijo Artur Mas, “no pararán tribunales ni constituciones”.
El Volk autoerigiéndose en entidad sagrada –como trinchera, naturalmente, de los sacerdotes que la definen–, a la que no se puede cuestionar y que castigará a quien la cuestione. Una entidad sagrada a partir de la cual deben definirse sus miembros (que serán eso: miembros, y no sujetos soberanos) y acatarla, desindividualizados en la adoración.
Nuestros nacionalistas piden a gritos estar en la Unión Europea; que se mantenga en la Unión Europea la aberración reaccionaria que persiguen. Siendo así que ellos representan justo aquello de lo que la Unión Europea huye, aquello contra la Unión Europea, tras la catástrofe de las dos guerras mundiales, con el nazismo en medio, se constituyó.
Exagero, naturalmente. Pero la semilla está ahí, íntegra como ella sola. Y manifestándose ya en denuncias como esta; en amenazas e incumplimientos de la ley; en todas las apelaciones que van más allá de la aséptica ciudadanía democrática.
Desde que se ha puesto de moda la llamada ley de Godwin, que habla de la alta probabilidad de que se mencione a Hitler o a los nazis en las discusiones, hay muchas risitas cuando esto ocurre. Pero que no nos cohíba el esnobismo cuando resulte que, como es el caso, la mención pueda (y entonces deba) hacerse con todas las de la ley.
[Publicado en Zoom News]