15.3.24

Indiferente como un caballero

[La Brújula (Opiniones ultramontanas), 3:52:22
 
Buenas noches. No sé si alguien se acuerda ya de José María Álvarez, pero es uno de esos poetas, no muy frecuentes, que conquistan lectores en cuanto se acercan a sus versos. Pasa también (me pasó a mí) con nuestro Jaime Gil de Biedma o el mexicano José Emilio Pacheco. Los tres son poetas que enganchan. José María Álvarez, nacido en Cartagena y a punto de cumplir ochenta y dos años, fue uno de los Nueve novísimos poetas españoles de la famosa antología de 1970. Sus poemas, vitalistas y culturalistas, llenos de viajes, se recogen en un libro de 700 páginas que es un lujo y que además es gratis, porque José María Álvarez regala el pdf en su página web. Basta poner en Google el nombre del autor y el título: Museo de cera. Sobre este título se hizo una broma. Como el libro y cada uno de los poemas llevan más citas, querido Latorre, que tu admirada Moby Dick, se dijo que, en vez de Museo de cera, debería haberse titulado Casa de citas. Me hace ilusión traer a José María Álvarez a la radio porque en la radio fue donde lo descubrí. Solía llevarlo El Loco de la Colina, a entrevistarlo y a que recitara sus versos. El poeta tenía una voz mejor que la mía y era más tarde que ahora, ya entrada la madrugada, pero quiero terminar con el primer poema, breve, de Museo de cera, que invita al coraje y la transgresión. Dice así: 
Descanso sin bajarme del caballo 
El calor destroza cuanto se ve 
Ante mí la Frontera 
Una voz me dice no cruces nunca esa Frontera 
Fumo un cigarro 
Sacudo mi uniforme de 35 campañas 
Indiferente como un caballero 
Que lo ha perdido todo y no espera ganar nada 
Cruzo el río.