9.3.25

Las doblemente enchufadas de Ábalos

[Montanoscopia] 

1. El consejo de redacción de un periódico suele ser adusto. Es como una mesa de cirujano de la doliente actualidad. Pero cuando la actualidad aporta putas enchufadas en la Administración es muy difícil mantener la adustez. Así ocurre, me dicen, en el de The Objective en los últimos tiempos. Pero la realidad esperpéntica tiene dos filos: el de la risa y el de la desgracia. La amarga mueca de la que hablaba Valle-Inclán. 

2. Qué papelón este 8-M el de los partidos que más exultaban en los 8-M: el PSOE de Ábalos, el Podemos de Monedero, el Sumar de Errejón. Ahora no logramos quitarnos de la fantasía que estos iban a las manis a refregarse la cebolleta. Mi corazoncito sigue estando con Ábalos y sus doblemente enchufadas. Al fin y al cabo, no le hizo mal a nadie salvo al Presupuesto. En las novelas de Galdós estaban las mantenidas y ahora todos los españoles hemos experimentado lo que es tener mantenidas a nuestro cargo. Aunque solo las usufructuara el entonces mano derecha de Sánchez. El presidente, por su parte, se atuvo al principio bíblico de que su mano izquierda no supiera (ni quisiera saber) lo que hacía su mano derecha. 

3. Apoteósico reportaje en El País, cuyo titular lo dice todo: "Cada vez más solteras (y más felices): 'Muchos hombres no saben estar a la altura'". Con esto pasa como con el que está fuera de Twitter y entra en Twitter para decir lo bien que está fuera de Twitter: si estuviera tan bien, no habría tenido la necesidad de entrar para proclamarlo. Yo creo en la soltería y en la felicidad (¡cómo no voy a creer!), pero si necesitas darle una armazón teórica, o ideológica, es que algo falla. Lo más divertido del reportaje es un demógrafo que dice: "Los hombres buscan mujeres que ya no existen y las mujeres hombres que aún no existen". ¡El tipo va y les planta a las tías, en pleno reportaje de ellas, que anhelan el príncipe azul! Por otro lado, es una malagueña la que dice que muchos hombres "no saben estar a la altura". Un diagnóstico que en realidad afecta a los hombres que tiene más a mano, los malagueños: frecuentemente majarones. Aunque el problema que tenemos los (¡escasísimos!) malagueños no majarones es que no encontramos malagueñas a nuestra altura. 

4. Una de esas mujeres felices de estar solteras suelta el siguiente speech: "Si aparece un señor adulto funcional, desertor de la masculinidad hegemónica tradicional y con una responsabilidad afectiva básica con el que compartir mi vida, pues mira, genial y si no, pues también". Y otra habla de "cuidado al otro", "complicidad luminosa", "dinámicas relacionales", "aspiraciones afectivas"... ¡A ver si el hombre que aún no ha nacido es aquel capaz de soportar esta jerga! 

5. Una mujer admirable es Amarna Miller. Desde que dejó su anterior trabajo (lo hizo limpiamente: sin renegar de él), se ha dedicado a viajar: por África, por la India, por todas partes. Va dejando sus comentarios, sus fotos y sus vídeos en las redes sociales (yo la sigo en Instagram). Es precioso ver cómo la va curtiendo el mundo: en su caso es la edad (que siempre trabaja) más una experiencia intensa, muy aireada. Es por ello una belleza moral. 

6. Agustín Rivera me recomendó el podcast de la editorial Anagrama. En cada episodio dialogan dos de sus autores. Escogí el de Leila Guerriero y Juan Tallón. Muy interesante, pero yo solo quiero contar una anécdota pronunciativa: para no decir argentinamente Tachón, Guerriero (extremando ese consejo de pronunciar "li" cuando es elle) decía Talión. 

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