30.9.22

La serie sobre Sánchez

[La Brújula (Zona de confort), 1:24:40]

Buenas tardes, querido Rafa. Te he oído decir aquí en La Brújula y esta mañana donde Alsina que a ti lo que te interesa de la serie sobre el presidente Sánchez es el corte del director: esa versión futura que incluya lo descartado. A mí también, aunque algo me dice que esa versión no cambiaría mucho. Sospecho que el director tiene unos principios cinematográficos tan radicales como aquellos cineastas del grupo Dogma, que se imponían a sí mismos numerosas restricciones. En este caso, la primera restricción debe de ser apagar la cámara cuando la realidad desagradable asoma. En el tráiler todo es agradable, salvo el plano insertado de un bombardeo en Ucrania, cuya utilidad por otro lado es mostrar lo agradable que es sentir la Historia desde Moncloa. No, no creo que fuese distinto el corte del director, porque no se habrán grabado abucheos a Sánchez, ni sus regañinas al jefe de Radio Televisión Española hasta hacerle dimitir, ni ninguna de las otras servidumbres oscuras del poder... Aunque sospecho que lo que se emita no mermará el potencial crítico del producto: la opción estética de exhibir esa burbuja acaramelada, con la que está cayendo, es pura corrosión. El director, en realidad, es un gamberro por hacerle a Sánchez un Nodo. Algo que, por lo demás, enamorará a los sanchistas. Empezando por el primer sanchista: Sánchez. Se nota que en la serie se ve guapo. Como en todas las demás circunstancias de la vida. Al cabo, su ejercicio como presidente no habrá sido más que un rodeo para que exista la serie, que será su auténtico legado. Por ella todo habrá merecido la pena, pensará Sánchez. Pero hay algo que me da morbo. Si la serie se titula 'Las cuatro estaciones', ¿qué harán cuando llegue el otoño? ¿El otoño del patriarca?