14.4.23

La verdad de Sánchez y Ferrovial

[La Brújula (Zona de confort), 1:24:12]

Hola, querido Rafa Latorre. Se ha malinterpretado la conducta de Sánchez con la empresa Ferrovial. Se ha hecho una lectura demasiado literal de sus reacciones y por eso nos ha resultado tan raro lo que hacía. No se entiende que se entrometiera en un proceso que parecía imparable y que, en principio, no iba directamente con él. Pero Sánchez lo convirtió en algo suyo y ahora parece que, como los accionistas han votado lo contrario de lo que él proponía, él ha sido el gran derrotado. Me resisto a verlo así. Sánchez no puede haberse comportado de un modo tan poco inteligente. Si lo miramos de otra forma, queda todo más razonable. Veamos. ¿Y si en realidad el presidente del Gobierno Pedro Sánchez hubiese estado apoyando y reforzando en todo momento la estrategia del presidente de Ferrovial Rafael del Pino? Quizá por solidaridad entre presidentes. Si repasamos los hechos desde esta nueva perspectiva, ya no parecen raros, sino que encajan. Por ejemplo, cuando se insinuó que una de las razones de la marcha a los Países Bajos de la sede de Ferrovial era la inseguridad jurídica de España, el presidente del Gobierno de España corrió en auxilio de esa tesis, pronunciándose de un modo que, en efecto, evidenciaba la inseguridad jurídica de España. Cuando se habló de razones fiscales para que Ferrovial se fuera de España, el Gobierno, para que Ferrovial se quedara en España, deslizó amenazas fiscales. Y así hasta esa última carta del Gobierno a los accionistas cuyo fin solo podía ser darles el último empujón a los indecisos. El éxito ha sido incontestable: el 93,3% de los accionistas ha votado a favor del traslado de la sede de Ferrovial. Una casi unanimidad que no se hubiera alcanzado si Del Pino no hubiese contado con la complicidad de Sánchez.